Los profesionales plantearon que la interrupción del servicio se dará “si no se corrigen los desajustes causados por la inflación y los retrasos en los pagos”; y reclamaron al Ministerio de Salud convocar a una “mesa de trabajo” para encontrar solución al conflicto.
La Confederación Unificada Bioquímica de la República Argentina (CUBRA) alertó que en un plazo de 20 días podrían dejar de atender a pacientes que accedan a sus servicios a través de obras sociales o prepagas, si no se corrigen “los desajustes” económicos -producto de la crisis del país- que afectan gravemente la operatividad de los laboratorios.
“La devaluación del peso, el incremento en los costos de los insumos médicos cotizados en dólares (que han aumentado entre el 22 y el 30 por ciento en los últimos 15 días), la desactualización del valor de la Unidad Bioquímica (UB) y los retrasos en los pagos por parte de las obras sociales y prepagas (que varían entre 60 y 90 días después de realizada la prestación) han llevado a la actividad bioquímica a un estado de inestabilidad y precariedad”, planteó la entidad a través de un comunicado.
En este marco, María Cecilia López, presidenta de CUBRA señaló: “Debemos alertar al Estado argentino, a los prestadores y, fundamentalmente, a nuestros pacientes sobre la grave situación en que se encuentran la mayoría de los laboratorios bioquímicos en la actualidad. En breve, muchos laboratorios no podrán hacer frente a sus obligaciones financieras, como los aumentos de salarios, bonos y aguinaldos. Si el Gobierno no colabora en acordar un aumento en las Unidades Bioquímicas, la situación no tiene retorno”.
Los insumos médicos han tenido aumentos que oscilan entre el 50 y el 400 por ciento, indicaron los Bioquímicos. “Los que más impacto han tenido son las jeringas, agujas y descartables que se necesitan día a día para continuar atendiendo a los pacientes”, precisó López.